A la hora de abrir nuestro local comercial, son muchos los elementos a tener en cuenta para que este funcione correctamente. Además de cuidar su estética y funcionalidad, es imprescindible la instalación de medidas de protección contra incendios, como los extintores. La legislación obliga a que se disponga de ellos, y suponen un elemento fundamental para la seguridad de nuestro espacio. La utilización de los extintores puede permitir una actuación rápida que evite la propagación del fuego y la generación de daños de gran calibre.
El número que necesitaremos, al igual que el tipo de extintor, dependerá de las distintas características de nuestro local y de los productos y materiales con los que trabajemos en él.
Elementos a tener en cuenta
Una de esas características principales será la dimensión que tenga nuestro local, aunque no la única. Anteriormente se calculaba el número de extintores necesarios en base a este aspecto, pero ahora se le da mayor relevancia a la actividad que llevemos a cabo. Dependiendo de los productos con los que trabajemos, los materiales que utilizaremos serán distintos. Por lo tanto, algunos materiales pueden presentar un riesgo mayor que otros, como pueden ser aquellos que sean inflamables.
Otro elemento a tener en cuenta serán las ordenanzas municipales que existan en el lugar en el que se encuentre nuestro local. De forma generalizada, estas suelen exigir la presencia de un extintor por cada 15 metros. Cuando se trata de zonas en las que se valora que el riesgo de incendio es mayor, esta distancia se reduce hasta los 10 metros.
¿Qué tipo de actividad se realiza?
Aunque existen unas normativas generales, las especificaciones pueden variar según el tipo de actividad que se realice. Esto es debido a que no todas suponen los mismos riesgos, por lo que es necesario diferenciar cada sector y aplicar medidas adicionales y especializadas. Algunos de estos casos específicos podrían ser:
- Los espacios de ámbito sanitario.
- Lugares destinados a actividades recreativas.
- Destinados a vehículos a motor.
- Las centrales eléctricas.
- Zonas en las que se lleven a cabo espectáculos públicos.
- Los alojamientos turísticos.
- Las instalaciones petrolíferas.
- Instalaciones y plantas frigoríficas.
- Lugares en los que se fabrican, utilizan y almacenan explosivos.
Ante las distintas variables que podemos encontrarnos, siempre es recomendable acudir a un profesional para que nos asesore y oriente sobre el número adecuado de extintores de los que debemos disponer, así como del tipo más indicado para nuestro negocio. De esta manera, además de garantizar la seguridad de nuestro local, también nos aseguraremos de estar cumpliendo con la normativa vigente.
