Cuando hablamos de la prevención de incendios es improtante conocer cuáles son las medidas que se pueden tomar y cuáles son las más acertadas para nuestras instalaciones. Dentro de la prevención pasiva de incendios existen una gran cantidad de posibilidades disponibles a nuestro alcance. Entre ellas, las placas de fibrosilicato.
Las placas de fibrosilicato son placas diseñadas con una función específica: revestir las estructuras metálicas protegiéndolas de las altas temperaturas. Gracias a su composición de silicato cálcico hidratado, pueden llegar a soportar temperaturas superiores a los 1000º. El refuerzo que suponen estas placas planas que tienen una densidad media-baja, aumentan la seguridad de las instalaciones donde se encuentran ante posibles incendios de cualquier tipo.
Cómo se fabrican y cómo se instalan las placas de fibrosilicato
Como hemos indicado, se ubican dentro de la categoría de protección pasiva ya que nos ayudan a que el fuego no se expanda y proteja determinados elementos como los tabiques de una edificación. Su capacidad de soportar altas temperaturas, se debe a que las placas de silicato cálcico son sometidas a procesos de exposición a altas temperaturas durante su fabricación. Con ello, se mejora y se les da una estabilidad mucho mayor ante el fuego. La fiabilidad de estos materiales contra incendios supone un valor añadido, ya que además tienen una gran durabilidad en el paso del tiempo.
Su instalación para los profesionales adecuados no es costosa en el tiempo ni supone realizar una obra como tal, con todos sus inconvenientes. Se puede realizar la instalación de placas de fibrosilicato con diferentes elementos según el espacio que se deba cubrir. Entre otros, los tornillos o las grapas son elementos con los que este tipo de instalaciones se puede realizar.
¿Dónde se usan las placas de fibrosilicato?
Este tipo de materiales contra incendios es empleado en más sitios de los que pensamos. Los hemos llegado a ver en más de una ocasión sin tan siquiera saber que se trataba de estas placas. Las placas de silicato cálcico hidratado se utilizan para cubrir superficies metálicas y tabiquería. Es por ello que podemos encontrarlas en espacios públicos como hospitales y laboratorios. También en centros de enseñanza como colegios públicos, institutos de educación secundaria o universidades de todos los tipos.
La protección con placas de fibrosilicato no es exclusiva de espacios públicos. Podemos encontrar este tipo de protección contra incendios también en espacios privados. Por ejemplo, en locales comerciales u oficinas de cualquier sector. En los elementos de compartimentación como los “cielos falsos” también es empleado, así como para todas las instalaciones dedicadas a la industria en general. Desde fábricas, hasta espacios de coworking pasando por naves industriales, los elementos de protección pasiva pueden salvar vidas a la vez que contener el fuego para que no se propague a todas las dependencias, salvaguardando determinadas instalaciones.
Estas placas planas con las que habitualmente compartimos espacio sin saberlo, también están presentes en zonas de tránsito público diario, como lo son los aeropuertos o las instalaciones de metro. La seguridad ciudadana es una máxima donde este tipo de materiales nos ayuda a que sea reforzada.
