Al igual que es importante disponer de extintores en nuestro entorno, ya sea nuestra vivienda o lugar de trabajo, también lo es tener en cuenta su fecha de caducidad. No podemos olvidar colocarlos en sitios que nos sean fácilmente accesibles y que siempre tengan al día su fecha de caducidad. De esta manera, estarán listos para ser utilizados de la forma más eficiente posible, si llega el momento de darles uso.
¿Por qué es importante tenerla en cuenta?
Son varios los factores que condicionan la fecha de caducidad de los extintores. Una vez que esta está cumplida, es imprescindible sustituirlos.
La razón de esto es que, como es normal, los extintores van sufriendo cierto deterioro con el paso del tiempo. De la misma manera ocurre con sus componentes, de forma que pueden ir perdiendo efectividad. Por esta razón, es fundamental que sean revisados y cambiados periódicamente. De lo contrario, podríamos encontrarnos con el problema de que, a la hora de usarlo, no funcione con todas sus aptitudes.
¿Qué mantenimiento necesitan?
Los extintores tienen una vida útil de 20 años. A lo largo de todo este período, estos van perdiendo capacidades. Es por esto que, de forma obligatoria, se establece la revisión de los mismos cada cierto tiempo. El retimbrado se lleva a cabo cada 5 años. Cuando un extintor ha sido retimbrado, tenemos la garantía de que, en caso de ser necesario su uso, va a tener un correcto funcionamiento. De esta manera, nos aseguramos de que va a cumplir adecuadamente su función principal, que es la de extinguir fuegos y evitar su propagación.
¿Qué es el retimbrado?
Al hablar de retimbrado, se hace referencia a las pruebas a las que son sometidos los extintores para comprobar su presión y correcto funcionamiento. Cuando la empresa encargada del mantenimiento de los mismos, realiza el retimbrado, debe hacer entrega del acta en el que figure el trabajo que se ha hecho. Asimismo, tendrá que realizar la cumplimentación de la etiqueta de revisiones.
Otros aspectos a tener en cuenta
Aparte del retimbrado, que se realiza cada 5 años, cada tres meses será necesario revisar otros elementos. Esto puede llevarse a cabo tanto por la empresa que realiza el mantenimiento como por el propio propietario. Estos otros aspectos a tener en cuenta serían la accesibilidad de los extintores, su señalización, los precintos, el peso, las válvulas, la manguera o el correcto estado de conservación de los mismos.
De forma anual, se comprobará el peso y la presión por parte de la empresa autorizada.
Aunque veamos que el extintor, aparentemente, se encuentra en buenas condiciones, si ha alcanzado los 20 años es necesaria su sustitución. De esta manera, garantizaremos nuestra seguridad y la de nuestro entorno en caso de tener que hace frente a situaciones de peligrosidad.
